Fichajes

La nueva y renovada formación de Los Cuervos para la celebración del 30 aniversario de su fundación incluyen dos flamantes fichajes: Paco Seguí y Serch Villanueva. ¿Qué decir de estos elementos, compañeros de fatigas en tantas aventuras? Buenos músicos y buenos amigos que se han incorporado al proyecto sin futuro número 2 con entusiasmo. Los ensayos marchan bastante bien, hemos llegado al punto en que los temas suenan pero hay que limar aquí y recortar allá, empastar bien e intentar conseguir dejar bien alto el pabellón. En el último, un apagón eléctrico dejo sin luz a medio polígono... ¡Ya están aquí Los Cuervos¡ jajajajaja

El bajista que sí sabía cantar

Gracias al programa que me pasó Rex-Mex estoy rescatando temas que conservo en cintas de K7. Luego cojo algunas fotos y hago un vídeo, como tantas otras veces, para subirlo a Youtube y que estén al alcance de cualquiera que se preocupe por encontrarlos. Tras casi 20 años sin escucharla me ha gustado mucho escuchar a Morcillo cantar esta canción que escribí, que según Rosaurio, me describe a la perfección, aunque cantada por él parece cobrar otro significado. Eso es lo que hace un gran artista, hace suyas las canciones y les da una nueva lectura. ¡Qué bien canta¡

Primera maqueta

Los Cuervos - 17 puñaladas. Un instrumental compuesto por Paco Orozco y Santiago Penagos perteneciente a la primera maqueta de Los Cuervos. Grabado en estudios Fritz en un multitrack de cuatro pistas. Paco Orozco, guitarra rítmica, Enrique Marí, bajo, Víctor Osset, batería y Santiago Penagos, guitarra solista. Éramos jóvenes y aún no sabíamos tocar muy bien pero la intención no estaba mal. Recuperado de la noche de los tiempos. Debió ser a principios de 1983, nunca habíamos grabado y se nota. Aunque, como bien dice Rex-Mex, una maqueta no es más que un primer esbozo, una muestra y no un producto final.

Carretera

Seguimos ensayando para la actuación en La edad de oro, este tema por ejemplo, una canción que escribí durante el servicio militar. Lo recuerdo bien, llevábamos lanza, arco largo, carcaj, escudo, grebas y casco con penacho de cola de caballo. Esta canción se llamaba Carretera 66 cuando la hice, luego la famosa Route 66 salía hasta en la sopa, los anuncios de pantys, las revistas de cotilleos y los envoltorios de chicle y le puse carrretera 63 pero al final creo que debiera llamarse "Carretera" a secas, sin número. He encontrado por ahí este cartel de cuando tocamos en Tropical junto con Los Vamps, sobre 1986.

Los ensayos van bastante bien, siempre que no acudan los heavis que tocan pared con pared, claro, están en su derecho, por supuesto, pero es imposible que nada suene bien si se oye otra música al mismo tiempo. Sin embargo, el lunes pasado estábamos solos y la cosa fue de categoría, da gusto sentir como los temas van cogiendo forma otra vez. Como resucitados de un sueño eterno para una sola noche de fantasmas. Este es mi tema del momento, daré la vara hasta la fecha señalada al menos y, aprovechando que hemos digitalizado gran parte del material de la banda, subiré vídeos a Youtube, como éste mismo que corona el post. Apúntate la fecha Ratón, que no puedes fallar, el 19 de mayo en La edad de oro, seremos Cuervos una vez más.

Llamando A Las Puertas Del Cielo

En un ambiente pre-fallas, con un tráfico increíble, cogí la moto y me fui a Russafa para asistir a una jam session de luxe con los amiguetes de Triple Jazz. Alfonso Sergio siempre me presenta como el guitarrista de Los Cuervos, un grupo al que él iba a ver cuando era joven. Hacía mucho tiempo que no cantaba esta canción y cambié una linea por otra, me comí "that long black cloud is comin' down..." Me veo en el vídeo más gordo de un cachalote, por eso será, se ve que me lo como todo.

Una Victoria Sin Mañana

Por fin se marchó lo más crudo del invierno y las mañanas soleadas casi primaverales invitan a un tranquilo paseo en moto. Así lo hago disfrutando de la compañía de la Triumph que me acompaña con su ronroneo gatuno. El sábado por la mañana, como otros días similares, me di una vuelta por l'horta nord, almorcé, muy bien además, en Bonrepós i Miranbell y circulé por tranquilas carreteras con poco tráfico. Siguiendo mi práctica habitual, si algún nervioso conductor con prisa va detrás de mí más de 30 segundos, paro para encender un cigarrillo y le dejo pasar deseándole buena suerte con la mirada. Tarareando alguna lejana melodía tipo The Letter, My rifle, my pony and me o Plastic Jesus, pienso un poco en todo y en nada, con la tranquilidad que siempre busco y no siempre encuentro.

El otro día, ya te digo, pensaba en la actuación de Los Cuervos, una victoria sin futuro, una página de historia sin mañana, como decía hablando de otra cosa Serge Lancel, en el mejor de los casos. Un treinta aniversario para amigos, familiares, fans recuperados, el borrachín que nunca falla y algún despistado habitual en estas ocasiones, pero también una despedida o algo similar. Es también un reencuentro con viejas canciones que no por haberlas escrito yo dejan de sorprenderme, unas veces para bien y otras para mal. Voy haciendo vídeos con fotos y subiéndolas a Youtube, una forma de compartir ese material olvidado con todo el mundo y con nadie quizás. Ensayando esta canción, Serch me dijo que le recordaba a una de REM, Losing my religion, un tema de 1991 pero Sangre en la boca de la estrella fue compuesta en 1985 y grabada en 1986. Grabábamos en un multipistas, de cuatro, analógico; todo con micros, hasta la batería acústica, en un claro ejemplo de cabezonería porque hasta muchos discos de la época se grababan con caja de ritmos. Dedicada a Arthur Rimbaud, un poeta francés con una obra formidable y una vida alucinante. Atención al tío Paco cantando y al Sr. Marí tocando las castañuelas... ¿cómo no iba a sorprenderme su escucha gratamente?